ACEITE DE OLIVA, el oro de la cocina mediterránea
El aceite de oliva es un alimento característico de nuestra tierra, su alto contenido en ácidos grasos insaturados, concretamente alto contenido de ácidos grasos monoinsaturados contribuyen a mantener niveles normales de colesterol sanguíneo.
En relación a las vitaminas, podemos hablar de que posee vitamina E, lo que le hace extraordinario en enfermedades coronarias. Estudios científicos nos revelan que contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo, de ahí que se hable de él como un elixir que aumenta la longevidad.
Desde un punto de vista tanto nutricional como saludable, siempre hay que escoger el aceite de oliva virgen o el aceite de oliva virgen extra, dado que para estos valiosos óleos se recogen las olivas en su punto óptimo de maduración y en menos de 24 horas proceden a la extracción por medios mecánicos para que el aceite sea de máxima calidad y no se vea alterado.
Para mejorar la salud la “posología” aconsejada será de tres cucharadas al día, que equivalen a un total de 50 gramos diarios. Se puede consumir una de estas cucharadas en ayunas para ayudar la limpieza intestinal matutina, ya que tiene efecto laxante suave. Es también un alimento excelente para desintoxicar el hígado y la vesícula biliar.
Si se consume crudo sus beneficios y cualidades son siempre mayores, dado que ninguna forma de calentamiento interviene negativamente en alterar sus diferentes propiedades. Una buena opción es usarlo para rociar tus verduras, ensaladas y por supuesto darte el placer de ponerlo en una rica tostada de pan.
Si te apetece tener otra opción, aquí te dejo un aceite aromático:
ACEITE DE ROMERO Y AJO
PREPARACIÓN
Pon a calentar el aceite a 40 grados, viértelo tibio en la botella que desees e introduce una ramita de romero fresco lavado y 1 ó 2 dientes de ajo.
Precinta el recipiente y déjalo reposar protegido de la luz directa 3 a 4 semanas antes de degustarlo.
Si el envase es bonito y lo etiquetas puede ser un regalo ideal, o también será bien recibido si lo llevas a una cena.
Cris Parga